Pues sí, continúan mis versos libres o poemas (ya que cuento con la bendición de algunos lectores para llamarlos así: ¡el pueblo ha hablado!)
El mundo está torcido en los bordes,
el suspiro del gigante acabó con su color.
La última pieza del rompecabezas
la custodia la locura.
¡Canta, oh dulce noche!
¡Dime los secretos del inframundo!
¡Revela las penas de los inmortales
y de los mortales!
¿Hades aún suspira por Perséfone?
¿El alma del Minotauro aún custodia
el laberinto?
¿El escritor sonámbulo
aún escribe bajo tu manto?